Antecedentes
Para los lectores asiduos de este blog, no será una sorpresa el rumbo que han tomado los acontecimientos de un año a la fecha, en Irak y El Levante (Siria y Líbano). En el post del 29 de agosto de 2013 (Lista la “intervención humanitaria en Siria), reporté:
<<Mientras la región medioriental en conjunto vive un gélido invierno árabe, donde destaca la contrarrevolución militar egipcia, arrojan mucha luz las operaciones sincronizadas de la resucitada Al Qaeda en Irak, Siria y Líbano bajo la denominación subregional específica ISIS: Islamic State of Iraq and Al-Sham –Estado Islámico de Irak y Al-Sham (Siria y Líbano)–, bautizado por los multimedia anglosajones como el grupo salafista/takfiri más radical de los sunitas de Al Qaeda (Financial Times, 18/8/13), que busca derrocar a Bashar y desestabilizar a Irak y al Líbano para la creación de su califato levantino>>
En el post del 4 de julio de este año (El grupo jihadista “Estado Islámico” restaura el Califato, tras un siglo), retomé la metamorfosis del grupo conocido como Ejército Islámico de Irak y el Levante o EIIL, –Isil, por sus siglas en inglés, y Daesh en árabe–, a Estado Islámico; y en el del 11 de julio, me refirí a Abu Bakr Al Bagdadí, el autoproclamado Califa del estado islámico en todo el mundo y rebautizado como el Califa Ibrahim, así como al territorio del Califato (¿Qué es un Califa, el califato Islámico y sus aspiraciones?
Empezaron a circular, entonces, noticias procedentes de la tercera ciudad en importancia de Irak: Mosul, que había caído en manos del EIIL el 10 de junio. Considerada la tercera ciudad en importancia de Irak, con cerca de dos millones de habitantes, la ciudad tenía más de 60,000 cristianos, que después de la invasión norteamericana de 2003 disminuyeron a 20,000.
Ya en el siglo II de nuestra era, la ciudad tenía presencia cristiana. Era una base vital para la Iglesia en Oriente, la autoproclamada Iglesia nestoriana, que la convirtió en sede metropolitana. También estaban presentes los monofisitas, la hoy Iglesia siro-ortodoxa. Estas iglesias usaban el siriaco, un idioma cercano a los apóstoles, y los pueblos siro-parlantes aún sobreviven en el área de Mosul.
Mosul era el centro de una red de monasterios, algunos de los cuales estaban entre los más antiguos e influyentes de todo el movimiento monástico. A cuarenta kilómetros de la ciudad encontramos San Elías y San Mateo (Mar Mattai) del siglo IV, Rabban Hormizd y Beth `Abhe de los siglos VI y VII, y muchos más: Mar Bihnam, Mar Gewargis (San Jorge), Mar Mikhael (San Miguel). Como en Europa occidental, estos lugares eran cruciales para la vasta tradición de la fe y enseñanza cristianas, y los más grandes no tenían nada que envidiar a Monte Cassino o Iona. En su apogeo, Mar Mattai era uno de los mayores claustros del mundo cristiano, con miles de monjes.
En los últimos días vivían en la ciudad unas 500 familias cristianas, a las que Estado Islámico dio en la tercer semana de julio un ultimátum: debían convertirse al islam o pagar un "impuesto de protección" de 750 dólares, si no querían morir.
En su Angelus del domingo 20 de julio, el Papa Francisco levantó su voz: <<He recibido con preocupación las noticias que llegan de las comunidades cristianas en Mossul (Irak) y de otros lugares de Oriente Medio, donde las mismas, desde el inicio del cristianismo, han vivido con sus conciudadanos ofreciendo una significativa aportación al bien de la sociedad. Hoy son perseguidas; nuestros hermanos son perseguidos, son expulsados, deben dejar sus casas sin tener la posibilidad de llevar nada con ellos. A estas familias y a estas personas quiero expresar mi cercanía y mi constante oración. Queridos hermanos y hermanas que sois perseguidos, sé cuánto sufrís, sé que estáis despojados de todo. Estoy con vosotros en la fe en Aquél que ha vencido el mal. Y a vosotros, aquí en la plaza y a quienes nos siguen por medio de la televisión, dirijo la invitación a recordar en la oración a estas comunidades cristianas. Os exhorto, además, a perseverar en la oración por las situaciones de tensión y de conflicto que persisten en diversas zonas del mundo, especialmente en Oriente Medio y en Ucrania. Que el Dios de la paz suscite en todos un auténtico deseo de diálogo y de reconciliación. La violencia no se vence con la violencia. ¡La violencia se vence con la paz! Oremos en silencio, pidiendo la paz; todos, en silencio... María Reina de la paz, ruega por nosotros>>.
Francisco puso en marcha a la diplomacia vaticana, remitiendo a los embajadores acreditados ante la Santa Sede una "nota verbal” para que la hicieran llegar a sus gobiernos y así la Comunidad Internacional se interesara por la situación.
Precisamente el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, leyó un nuevo llamamiento para que la Comunidad Internacional ponga fin a este "drama humanitario”.
Empezaron a llegar las fotos de los cristianos crucificados y el valiente ejemplo de Mahmoud Al ‘Asali, profesor de leyes en el departamento de pedagogía de la Universidad de Mosul; quien no aceptó permanecer en silencio frente a la violencia en contra de los cristianos de Mosul, obligados a decidir entre la conversión al Islam, el pago de la «jizya» (impuesto islámico para los no musulmanes) o la fuga. Así, el profesor Mahmoud Al ‘Asali, tuvo el valor de denunciar abiertamente esta forma de brutal limitación que, según su opinión, va en contra de los preceptos del Islam. Un gesto que pagó con la vida: los milicianos del Isil lo asesinaron el 21 de julio en Mosul.
Irak: ن, ¡Todos somos nazarenos!
Pero antes de darles a elegir entre la conversión, el impuesto, la huida o la muerte, los islamistas empezaron por marcar todas las casas de los cristianos con un ن, a menudo inscrito en un círculo.
Este símbolo es de hecho una letra del alfabeto árabe, el «nombre», que corresponde a la «N» del alfabeto latino, una N por «Nasarah», es decir, nazareno, el término peyorativo con el que se designa a los cristianos en el Corán.
En apoyo a los cristianos de Irak perseguidos en la más total indiferencia, entre el drama ucraniano y el conflicto palestino-israelí, los cristianos de todo el mundo están llamados a mostrar este símbolo – ن - en las redes sociales.
Los yihadistas destruyeron el 25 de julio la tumba y mezquita de Jonás, también venerado por los islamícos.
El patriarca caldeo Louis Raphael Sako hizo un llamamiento a las Naciones Unidas para que el Consejo de Seguridad no permanezca como un simple observador de las continuas atrocidades que están cometiendo los extremistas islamistas del llamado Estado Islámico creado en el norte de Irak. En particular, hacía referencia a la situación de Mosul, donde miles de familias de cristianos han sido obligados a dejar la ciudad y abandonar sus casas y propiedades. En las últimas 24 horas han muerto 40 personas en Irak a causa del conflicto.
El patriarca Sako habló también sobre la llamada del Papa en una entrevista a Radio Vaticano. "Estamos muy agradecidos y emocionados por su solidaridad, simpatía y oración. Ha dicho que está muy cerca de los cristianos y que reza por Irak. Cuando le he dicho que los cristianos son fuertes en la fe y en la esperanza, ha dicho: '¡Bien, bien! ¡No perdáis la esperanza!'", ha afirmado. Asimismo ha indicado que "es realmente un apoyo paterno para nosotros, es una cercanía muy importante, que nos da la fuerza, la confianza de perseverar y esperar una situación mejor en Irak".
Sobre la destrucción de lugares sagrados por parte del Estado Islámico, el patriarca afirma que "estos grupos tienen una ideología muy fuerte. Representan, por tanto, un peligro no solo para los cristianos, sino también para los musulmanes del mundo entero. Ellos han comenzado con destruir la gran mezquita histórica de Jonás, donde se dice -según la tradición- que está la tumba del profeta. La mezquita fue construida sobre las ruinas de una iglesia caldea. Lamentablemente ha sido destruida completamente, como otras mezquitas, y amenazan también nuestras iglesias. Estos yihadistas - Isis y otros- son un peligro para el mundo entero".
Por otro lado, el patriarca subraya que "los cristianos deben estar unidos, como también los musulmanes, los suníes y los chiíes. Deben tomar una posición muy clara para un discurso religioso abierto, equilibrado, si no perderán. El cristianismo oriental debe continuar viviendo. Nosotros, en nuestros institutos, formamos una generación abierta a cristianos y musulmanes. Todos los ciudadanos deben, no solo sobrevivir, sino vivir en libertad y dignidad, y esta es la responsabilidad del mundo entero, cristianos y musulmanes".
Finalmente, Sako explica en la entrevista que las familias cristianas que han sido expulsadas de sus casas necesitan ayudan. "Nosotros como Iglesia hemos dado mucho realmente. El Pontificio Consejo Cor Unum ha mandado 40 mil dólares y el domingo iré al norte para llevar una ayuda del Patriarcado a todos. Hay una pequeña esperanza, pero los muros entre los grupos étnicos y confesionales son realmente altos".
El día 6 de agosto, la Iglesia Católica en pleno, se unió a la jornada mundial de oración por la paz en Irak, convocada por el patriarca Sako.
La carta del Papa a Ban Ki-moon
El 9 de agosto. el papa Francisco envió una carta al Secretario General de la ONU Ban Ki-moon expresando <<He pedido a Su Eminencia el Cardenal Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos -que sirvió como Representante de mis predecesores, el Papa San Juan Pablo II y el Papa Benedicto XVI, ante el pueblo de Irak-, que manifieste mi cercanía espiritual y que exprese mi preocupación, y la de toda la Iglesia católica, por el intolerable sufrimiento de aquellos que solo desean vivir en paz, armonía y libertad en la tierra de sus antepasados. Con el mismo espíritu, le escribo, Señor Secretario General, y pongo ante usted las lágrimas, los sufrimientos y los gritos desesperados de los Cristianos y de las otras minorías religiosas de la amada tierra de Irak. Mientras renuevo mi llamado urgente a la comunidad internacional a intervenir para poner fin a la tragedia humanitaria en curso, animo a todos los organismos competentes de las Naciones Unidas, en particular a los responsables de la seguridad, la paz, el derecho humanitario y la asistencia a los refugiados a continuar sus esfuerzos en conformidad con el Preámbulo y a los Artículos pertinentes a la Carta de las Naciones Unidas […] Confiado en que mi llamado -que uno al de los Patriarcas Orientales y de los demás líderes religiosos-, encontrará una respuesta positiva, aprovecho la oportunidad para renovar a Vuestra Excelencia mi más alta consideración.>>
La Santa Sede pide con un lenguaje inédito a los líderes musulmanes del mundo que condenen públicamente los crímenes contra las minorías en Irak [1]
<<El Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso este martes -12 de agosto- ha condenado “sin ambigüedad" las que llama “prácticas indignas” de los milicianos del Estado Islámico en Irak. El dicasterio del Vaticano critica abiertamente las masacres, las decapitaciones, los impuestos para los cristianos, las expulsiones forzadas, el rapto de mujeres, la destrucción de lugares de culto, entre otros actos de persecución. “Ninguna causa puede justificar tal barbarie y ciertamente no una religión” confirmó.
“Este Pontificio Consejo, todos aquellos comprometidos en el diálogo Interreligioso, los seguidores de todas las religiones, así como todos los hombres y las mujeres de buena voluntad, no pueden sino que denunciar y condenar sin ambigüedad estas prácticas indignas del hombre” asegura el comunicado.
A propósito de la “restauración del Califato” en Irak y de la persecución de los cristianos en el país, el Pontificio Consejo para el Diálogo Inter-religioso del Vaticano ha emitido una declaración para denunciar “los crímenes” que se hacen en nombre del Califato, al mismo tiempo que recuerda su “abolición el 29 de octubre de 1923 por Kamal Ataturk, fundador de la Turquía moderna”.
“La contestación de esta restauración por parte de la mayoría de las instituciones religiosas y políticas musulmanas no ha impedido a los jihadistas del ‘Estado Islámico’ de cometer […] actos criminales indecibles” confirma la declaración.
Asimismo, el Vaticano invitó a los líderes religiosos musulmanes a rechazar la violencia que arremete contra “los cristianos y los Yazidi” entre otras minorías en Irak. Ante la situación dramática exigió una “posición clara y valiente por parte de los responsable religiosos, sobre todo musulmanes, de las personas comprometidas en el diálogo Inter-religioso y de todas las personas de buena voluntad”.
“Todos debemos - prosiguió el comunicado- unánimemente condenar sin alguna ambigüedad estos crímenes y denunciar la invocación religiosa para justificarlos”
El Pontificio Consejo para el Diálogo Inter-religioso, presidido por el cardenal, Jean-Louis Tauran, no hace giro de palabras y menciona los crímenes del Califato en Irak:
Masacres de personas por el sólo motivo de pertenecer a una religión;
La aborrecible práctica de la decapitación, de la crucifixión y de colgar cadáveres en las plazas públicas;
La decisión impuesto a los cristianos y los Yazidi entre la conversión al Islam, el pago de un impuesto (la jizya) o el éxodo;
La expulsión forzada de decenas de miles de personas, incluidos niños, ancianos, mujeres embarazadas y enfermos;
El rapto de muchachas y de mujeres pertenecientes a las comunidades Yazidi y cristianas como botín de guerra (Sabaya);
La bárbara imposición de la práctica de la infibulación (mutilación de los genitales femeninos);
La destrucción de los lugares de culto y de los mausoleos cristianos y musulmanes;
La ocupación forzada o la profanación de Iglesias y monasterios;
La remoción de crucifijos y de otros símbolos religiosos cristianos y de otras comunidades religiosas;
La distribución del patrimonio religioso y cultural cristiano de falo inestimable;
La violencia abierta con el objetivo de aterrorizar la gente para obligarla a rendirse o de escapar.
En peligro la cultura del diálogo y la convivencia que ha costado siglos
“Por otro lado, no podemos olvidar que los cristianos y los musulmanes han vivido juntos - sea con altos y bajos- durante siglos, construyendo una cultura de la convivencia y de la civilización digna de orgullo. Sobre esta base es que en los últimos años, el diálogo entre cristianos y musulmanes ha continuado y se ha profundizado”. >>
Hillary Clinton descubre la verdad a medias
Hillary Clinton, Secretaria de Estado de enero de 2009 a febrero de 2013, concedió una entrevista el pasado día 10 de agosto a Jeffrey Goldberg de la revista The Atlantic, relacionada con su reciente libro Hard Choices, que causó mucho furor por su crítica teatral, al presidente Obama –debido a su error de no haber intervenido en Siria–, así como en su apreciación “de haber financiado y entrenado mal a los rebeldes sirios, por lo cual surgió el Estado islámico”. A su juicio el no haber ayudado al Grupo Central del Ejército Libre de Siria desembocó en un gran vacío que los yihadistas han llenado ahora. Es decir, lo incorrecto no fue la imperialista intervención en territorio sirio -que aún tiene sumido al país en una guerra civil- para ayudar a los rebeldes, sino haberlo hecho al grupo incorrecto.
En tanto en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, el congresista Frank Wolf denunciaba que los cristianos están sufriendo un genocidio en Irak mientras que el gobierno de Estados Unidos y las Naciones Unidas permanecen en silencio.
"Creo que lo que está ocurriendo con los cristianos en Irak es un genocidio y un crimen contra la humanidad", señaló Wolf.
"¿Dónde está Occidente? ¿Dónde está el gobierno de Obama? ¿Dónde está el Congreso? El silencio es ensordecedor”.
Jorge Pérez Uribe
[1]http://www.aleteia.org/es/internacional/articulo/salto-de-calidad-a-las-relaciones-vaticano-islam-la-verdad-sin-pelos-en-la-lengua-5292667780988928